La curiosidad por cosas de carácter original, misterioso y espontáneo fue el primer indicio de que el arte iba a ser parte de la vida de Hugo. Aprendió de forma autodidacta a tallar madera con el propósito de fortalecer y rehabilitar su mano derecha y luego le interesó experimentar con pintura acrílica y lienzo. Como muchos, comenzó a utilizar la pintura como método de sanación.
“Se trataba de ejercer una secuencia empleando la pintura según el color al lienzo dictado por mi estado emocional, cada obra pretendía ser una catarsis e idea que purificase mis aflicciones y paranoia.”
Durante sus nueve años de progreso en sus reflexiones y depuración mental, encontró la serenidad entendiendo que el artista “es un ser privilegiado que debe cumplir y pagar su cuota de aportar en el ámbito generacional y cultural, acorde a sus tiempos.”
El arte lo ha ayudado de una manera extraordinaria. A través de el se ha convertido en una persona disciplinada, sensible y a la vez solitaria, lo que lo ha llevado crear un estudio multiuso, ¨La Estancia de Lata¨, donde puede aislarse y dejar su imaginación volar. Allí con el tiempo, y a base de ensayo y error, logra terminar cualquier obra formulada, luego de configurar fragmentos de imágenes en su memoria de forma “sublime”.
“Puedo trasmitir toda una corriente de pensamientos a través de mi trabajo y eso me hace sentir optimista. Lo suficiente para seguir trabajando en un nuevo esquema evolucionado que supere el anterior.”
El concepto de ¨La Estancia de Lata¨ surgió después de horas de contemplación y la necesidad del artista de construir un espacio que satisficiera su espíritu creador, “donde la musa inundara la atmósfera interna del laberinto logrado, una estancia donde la intensidad de la iluminación se mantuviera homogénea y de forma teatral a todas horas.”
El estudio funciona como un área para mostrar los trabajos acabados, y el resto de los espacios como un laboratorio que le permite entrar en un estado de creatividad y ¨flow¨. Comenzó a elaborarlo en el año 2012 de manera artesanal y desde esa fecha ha estado sujeto a considerables transformaciones.
“Es un trabajo en progreso, porque mientras lo utilice, surgirán nuevas ideas que correspondan a la necesidad de las obras, su creación y su forma de presentación.”
Actualmente está limitado al público y solo pueden acceder aquellos que no interfieran con el proceso creativo que allí se produce.
Al crear, Suriel se inspira en la realidad más que en la ficción, ya que en su caso la historia de su vida promueve lo enigmático, y esa es su mayor inspiración. La música de Kruder & Dorfmeister, la cual posee una mezcla entre lo psicodélico y el downtempo, también es una gran influencia para él.
El arte para Hugo es “la acción de capturar los diferentes reflejos de primor de manera espontánea a través de los múltiples médiums de creación pura y directa” y su misión con el mismo es “complacer y satisfacer la curiosidad de mi espíritu aventurero producido por la musa y el duende que provienen desde los confines más profundos de mis sueños.”
Para saber más de Hugo, visítalo en su página web: http://www.hrsuriel.com
